Al crear un estanque, o jardín acuático, debemos tener en cuenta una serie de principios básicos para su correcta realización. La más importante es su ubicación. Es importante que donde esté situado siempre reciba la luz del sol, para que el ecosistema que alli se establece sea viable y esencial para las plantas acuáticas que en él viven, ya que estas necesitan mucha luz.
Visualmente si situamos el estanque en el punto más bajo del terreno será más atractivo. Pero aquí debemos tener especial cuidado que no sea una zona que acumule agua en invierno: la presión de la capa freática puede deformar la lámina o mover la estructura prefabricada y dejarla al aire.
Saber por donde pasan las tuberías y cables de las edificaciones es importante para evitar sorpresas a la hora de la excavación. Así como preparar la instalación antes de realizar el estanque si se pretende traer hasta él conducciones de agua o electricidad. A la hora de trabajar con electricidad deben tenerse tambien en cuenta, las normas de seguridad y comprobar que todos los productos que vayamos a emplear, están indicados específicamente para su utilización con agua. Bombas, filtros, luces y otros elementos eléctricos, como los de la firma Oase cumplen todos estos requisitos para darnos total seguridad.
Si hay niños pequeños que jugarán en el jardín sería indicado cercar el estanque o cubrirlo con una fuerte malla metálica hasta que lleguen a una edad en la que una caída accidental no les ponga en peligro.
También debemos prestar atención a los árnboles, sus raices presentan los mismos inconvenientes que la presión de la capa freática y tampoco deseamos su sombra, ni las hojas que de ellos caen.
Calcular su capacidad
Si el estanque es irregular es más difícil su cálculo. El mejor método es dibujar cuidadosamente su forma en un papel milimetrado, a escala. Al contar el número de cuadrados que ocupa podemos conocer su área de superficie. Los cuadrados que estén parcialmente ocupados deben sumarse aparte. El resultado no es totalmente preciso, pero si nos da una indicación muy aproxximada. Esta cifra debe multiplicarse por la profundidad media para conocer el volumen.
Si el estanque es regular, es más fácil su cáculo. Se mide la superficie multiplicando el ancho por el largo y el resultado se multiplica por la profundidad media. La cantidad obtenida es el volumen en metros cúbicos. Para calcular la capacidad en litros, hay que multiplicar los metros cúbicos por mil.
Principios básicos:
·· Situar el estanque a pleno sol.
·· Alejado de árboles. Especial atención con los de la familia Rosaceae (Prunus), ya que son los huéspedes invernales de los áfidos, que atacan a los nenúfares.
·· Especial atención a la ubicación de las conducciones subterráneas.
·· Preparar al comienzo la zona para las conducciones subterráneas necesarias como las de electricidad.
·· Visualmente conviene situar el estanque en zonas bajas, asegurandonos que no es zona empantanada, si es preciso se instala un drenaje.
·· Tener en cuenta la profundidad, que sea la adecuada para las plantas, tanto las de agua profunda como las de los márgenes.
·· Contar con las medidadas de seguridad si hay niños.